#GIVINGTUESDAY: Historias que muestran la efectividad de tu ayuda
En un día como éste en el que todo el mundo tiene la oportunidad de apoyar a una causa, queremos mostrarte el efecto que resulta de este pequeño gesto que es Dar.
Andrea: La historia que no se volverá a repetir
Andrea nació en Fada, Burkina Fasso. A los 6 meses tenía vómitos y fiebre alta, sufría diarreas y tosía. Su madre, Florencia, no sabía qué era lo que le estaba pasando a la niña, no entendía los síntomas. Decidió llevarla a nuestro centro nutricional. Una vez que el médico la diagnosticó, entre todo el personal del centro le han explicado a Florencia, su madre, todos los aspectos de la desnutrición. Y así, le han enseñado a ayudarla a evitar que esta situación se vuelva a repetir.
Andrea ya se ha recuperado, ahora toma el tratamiento nutricional en casa y acude a las revisiones con los doctores en nuestro centro nutricional. Sus padres ya no tienen miedo de que vuelva a enfermar. Siguen a rajatabla los consejos recibidos por los médicos.
Eternamente enfermo: Djassanou
La madre de Djassanou veía a su hijo tan enfermo que pensaba que no iba a sobrevivir. Djassanou tiene 14 meses y ya había sido tratado antes de desnutrición en nuestro centro de Fada, Burkina Fasso, pero nunca había llegado a ganar peso. Cuando sus padres vieron que tenía fiebre y diarrea además de vómitos, intentaron solucionarlo con métodos tradicionales, que no funcionaron. Por eso lo mandaron a uno de nuestros centros nutricionales
Allí, Aminata, la madre de Djassanou, recibe formación e información sobre la desnutrición, sus causas y consecuencias y cómo prevenirla. "Durante los 11 días que estuvimos allí, me gustó mucho la forma en que el personal se encargó de mi hijo".
Djassanou ha estado comiendo mejor, y empezado a comer comidas sólidas. Su madre lo que quiere es que su hijo no vuelva a sufrir desnutrición.
El pequeño luchador
Mahamadi es el tercero de tres hermanos. Durante 11 días, ha estado en nuestro Centro de tratamiento Nutricional en Fada, Burkina Fasso y se le ha diagnosticado desnutrición aguda severa.
Antes de su llegada al centro, estaba enfermo con diarrea y fiebre.
"Cuando se enfermó, al principio no podía siquiera sentarse por sí mismo. Debido al tratamiento que ha recibido, estoy encantada de decir que está mucho mejor y ya se puede sentar por sí mismo ", nos cuenta Zalissa, su madre. Aunque está mejor, actualmente Mahamadi aunque continúa ingresado en el Centro de tratamiento Nutricional de Fada, con vómitos y tiene manchas blancas en la boca. Por ahora sólo es capaz de beber la leche materna y la leche terapéutica proporcionada por el centro, ¡que le encanta!
«Estoy muy agradecida por el apoyo de Acción contra el Hambre y por hacerse cargo de los niños enfermos, como mi hijo Mahamadi»