Hambre y gerra en Yemen

Después de casi cuatro años de conflicto, y a pesar de todos los esfuerzos para detener el desplazamiento de personas, el hambre y las enfermedades, Yemen sigue siendo la peor crisis humana en la actualidad. El sufrimiento infligido sobre el pueblo yemení es causado únicamente por la acción del hombre y continuará deteriorándose rápidamente si no se toman medidas de urgencia para poner fin a la violencia.

Si continua el aumento de los combates, el país corre el riesgo de sufrir una devastación total: la escalada de violencia que vive la ciudad portuaria de Hodeidah pone en peligro la seguridad de los civiles y amenaza el suministro de combustible, alimentos y provisiones médicas al resto del país. Poniendo en peligro la vida de millones de mujeres, hombres y niños yemeníes.

Los civiles son quienes sufren las consecuencias más graves de esta guerra: las infraestructuras civiles, como los mercados, los hospitales, los autobuses escolares y las fábricas continúan siendo golpeadas duramente por todas las partes con impunidad, según informó el grupo de expertos eminentes de las Naciones Unidas sobre Yemen.

Hay más de 1800 escuelas directamente afectadas por el conflicto, 1500 han sido gravemente dañadas o destruidas y 21 de ellas están siendo utilizadas por grupos armados. Hay toda una generación perdida de niños y niñas yemeníes: dos millones de niños y jóvenes siguen sin asistir a la escuela, privados de una educación y expuestos a los niveles más altos de violencia y explotación…

Yemen, un país al borde de la hambruna

Los conflictos prolongados y la erosión de las redes de seguridad han dejado a millones de yemeníes sin acceso a medios de subsistencia o la capacidad de hacer frente a la crisis económica. Se estima que 1.2 millones de trabajadores públicos, especialmente en las regiones del norte, no han recibido sus salarios habituales en más de dos años y una economía de guerra ha dejado a millones de familias con muy pocas oportunidades de obtener ingresos.

Además, 1,4 millones de personas permanecen en zonas de difícil acceso, aislados de asistencia y apoyo vitales. La escalada de violencia ha provocado que haya cientos de miles de desplazados en los últimos meses, incluyendo a medio millón de personas que huyeron de la ciudad de Hodeidah en junio de este año. 

Datos clave de la guerra en Yemen

17.8 millones de personas, más del 60 por ciento de la población, padecen inseguridad alimentaria y más de 8.4 millones de ellas están al borde de la inanición.

  • De los cuales 4.2 millones son niños. Otro millón de niños se encuentra en riesgo debido a que los precios de los alimentos y los combustibles se disparan en todo el país.
  • La desnutrición amenaza directamente la vida de millones de personas, pero también debilita el sistema inmunológico, lo que provoca que las personas mueran a causa de enfermedades prevenibles, como el cólera y la neumonía.
  • Las madres en periodo de lactancia, los niños y los ancianos siguen siendo la población más vulnerable.

Soluciones posibles para el conflicto

La comunidad internacional debe intensificar la presión para que todas las partes en el conflicto:

  • Cumplan con sus obligaciones conforme al derecho internacional y tomen medidas inmediatas para prevenir y poner fin a la violación de derechos que está sufriendo el pueblo yemení.
  • Aseguren el acceso humanitario y comercial de bienes y servicios esenciales.
  • Involucren a todas las partes en el conflicto para encontrar una solución política pacífica, sostenible e implementable que incluya a mujeres, jóvenes, grupos minoritarios y la sociedad civil.
  • Solo una solución política puede poner fin a la guerra y restablecer la paz en Yemen. Todas las partes deben cesar de inmediato las hostilidades, acordar un alto el fuego y cooperar para evitar una catástrofe sin precedentes.

Comparte esta entrada