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Filipinas vuelve a sobrevivir a otro tifón

21/10/16

El tifón Haima ha afectado a cinco millones de personas

 

El tifón Haima ha afectado a cinco millones de personas

A unas semanas de cumplirse el tercer aniversario del Tifón Haiyan, posiblemente el más mortífero de las historia reciente de Filipinas, el país ha vuelto a sufrir la inclemencia del clima. El pasado 19 de octubre el super tifón Haima, conocido localmente como Lawin, golpeó Filipinas sacudiendo comunidades enteras con fuertes vientos de hasta 225 km por hora, ráfagas de hasta 315 kilómetros por hora y lluvias torrenciales. A su paso 5 millones de personas fueron afectadas en las regiones de Cagayan, Isabela y Kalinga, Abra y Apayo. Un total de 266 municipios sufrieron inundaciones y desprendimientos tras el impacto del precedente tifón Sarika, que tocó tierra dos días antes.

La prioridad más inmediata, según el director de Acción contra el Hambre en Filipinas, Javad Amoozegar, es analizar el impacto del tifón Haima, identificar las áreas más dañadas y proteger a las poblaciones afectadas. "Nuestros equipos de respuesta de emergencia de nuestra misión ya se han desplegado para determinar la magnitud de los daños y responder a las necesidades inmediatas cuando sea necesario. A partir de este momento, todavía hay áreas sin ser evaluadas, debido a la dificultad de acceder a ellas", dice Amoozegar.

En cualquier contexto de emergencia, desde Acción contra el Hambre trabajamos para atender las necesidades inmediatas de las poblaciones más vulnerables. Los niños menores de 5 años, las mujeres embarazadas y en estado de lactancia, los acianos o las personas con discapacidad son nuestra mayor prioridad. Trabajamos proporcionando ayuda nuticional, acceso a los sistemas de higiene y saneamiento y agua potable, y recosntruyendo sus medios de vida.

Unos días antes de que el tifón tocara tierra, desplegamos en Manila los suministros de primera necesidad que podrían salvar vidas. Preparamos kits de higiene y saneamiento, sistemas de potabilización de agua, generadores, mantas y mosquiteras. También preparamos nuestros equipos de apoyo psicosocial y lotes de alimentos básicos para la emergencia. Todo preparado para poder distribuirlo con la mayor celeridad posible en caso de necesidad.

“Reconstruir los medios de vida y los servicios básicos como el agua potable o la higiene y el saneamiento es esencial para prevenir un problema de salud pública y atajar de raíz la desnutrición. Para nosotros es imposible reducir la desnutrición sin agua segura y medios de vida que permitan sobreponerse a las familias afectadas”, señala Amoozegar.

Desde Acción contra el Hambre trabajamos estrechamente con las autoridades locales y nacionales en actividades relacionadas con el agua, la higiene, el saneamiento, la nutrición y apoyo psicosocial. Porque estamos comprometidos con los sectores más vulnerables de un país frecuentemente sacudido por los desastres naturales.

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