Trabajando la resiliencia en Bolivia

El proyecto Tarope trabaja para la reducción de vulnerabilidades de la población boliviana ante eventos climáticos adversos en las cuencas de los ríos Beni y Mamoré. Con una gran participación, se ha desarrollado la primera simulación ante una eventual inundación en el departamento del Beni de forma paralela con doce municipios identificados como los más vulnerables por el fenómeno climatológico de El Niño.

El evento dirigido por el COE Departamental y la participación de los COE municipales, Comando Estratégico Operacional (CEO) Mamoré, Armada Boliviana, VIDECI (Viceministerio de Defensa Civil), SENAMHI, SAR, Bomberos, Cruz Roja, Policía Nacional, SEDES y FEGABENI, con el apoyo de Visión Mundial Bolivia (VMB) Acción Contra el Hambre (ACH) y Grupo de Voluntaria Civil (GVC) financiados por el Departamento de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (ECHO), contempló la conformación de ocho mesas sectoriales que trabajaron en planes de acción para la respuesta a un evento adverso específico mediante el cual se pudo evaluar la capacidad de respuesta coordinada de las instituciones y medir la eficacia de sus planes y protocolos de contingencia. El evento contó con representación desde los tres niveles de acción y respuesta, municipal, departamental y nacional, bajo el liderazgo del viceministro de defensa, Oscar Cabrera, quien destacó la participación de la totalidad de actores responsables ante eventos adversos. “El objetivo, haya o no inundación, es que tenemos que prepararnos para tomar previsiones porque aquí lo que vamos a aprobar son la aplicación de los planes de contingencias, la activación de los COE y también como se utilizan los sistemas de comunicación para poder tomar decisiones”, remarcó Cabrera, a tiempo de informar que los efectos del fenómeno de El Niños se mantienen por lo que es oportuno aprovechar este tiempo para seguir realizando actividades de fortalecimiento de las capacidades de respuesta a eventos adversos.

Por su lado el representante del COE departamental de Beni, Coronel Cristian Cámara, sostuvo que es importante que “podamos medir y evaluar las capacidades de toma de decisiones, el poder de coordinación, las relaciones interinstitucionales (puesto que) en todo plan de contingencias no solamente debemos abordar la parte operativa, sino también la intelectual y protocolos, es decir, debemos saber con quién debemos coordinar”.

De acuerdo la ley 602 Gestión de Riesgos y el DS 2342 donde reglamenta que tanto la gobernación como el municipio deben aplicar sus planes y protocolos de contingencia en función a esta normativa legal, en ese sentido es pertinente contemplar las competencias tanto del COE departamental y municipal. “Esas fortalezas y debilidades son las que queremos medir el día de hoy para poder prepararnos ante una eventual llegada del fenómeno de El Niño” acotó Cámara.

Para el director nacional de operaciones de Visión Mundial Bolivia, Fernando Colque, lo primero es “el desarrollo de capacidades enmarcados en la normativa nacional y como todos los actores que participamos en emergencias tenemos roles y funciones, es importante en esta simulación y en este simulacro, determinar esos roles, determinar fortalezas y pero también determinar de forma conjunta las brechas que puedan existir aún”.

Se destaca la participación de los vecinos del barrio Villa Marín de Trinidad toda vez que con la presencia de los mismos se pudo desarrollar con éxito las acciones de registro y admisión en el campamento que fue emplazado en la avenida 27 de Mayo como parte del simulacro por el regimiento de infantería Lino Echeverría, en cuya integración de trabajo con el municipio la policía nacional, el SAR, bomberos municipales y la junta de vecinos se desplegó personal para el armado de un campamento según normas del Esfera Amigable con contemple aspectos básicos para acoger a familias que podrían ser afectadas por algún fenómeno adverso.

Fortalecimiento de la resiliencia

El proyecto Tarope para la reducción de vulnerabilidades de la población ante eventos climáticos adversos en las cuencas de los ríos Beni y Mamoré, financiado por el Departamento de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (ECHO), bajo la coordinación y respaldo del Viceministerio de Defensa Civil (VIDECI) viene desarrollando sus acciones desde junio del presente año a través del consorcio conformado por agencias humanitarias, a saber, Grupo de Voluntario Civil (GVC), Acción Contra el Hambre (ACH) y Visión Mundial Bolivia (VMB) para lo que se han desplegado procesos de socialización y coordinación con diferentes instancias y niveles de la sociedad, entre comunidades beneficiarias, gobiernos municipales, del departamento del Beni y a nivel nacional que permite vislumbrar una alta vinculación de los mismos para alcanzar los resultados relacionados al fortalecimiento comunitario para la resiliencia de las vulnerabilidades ante eventos adversos.