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El caso de Lucía Ciller: emprender para vivir dignamente

 

Arquitecta de formación y artesana de corazón. Lucía Ciller es una joven murcianica que estudió y trabajó en Madrid hasta los 29 años. “Llegó un momento en el que me pregunté hacia dónde iba, dónde estaban mis raíces, qué quería en mi vida. Pasé por muchas situaciones laborales, alguna de ellas como falsa autónoma, y no veía proyección laboral ni familiar. Y decidí volverme a casa, a Murcia, y comenzar mi proyecto Luzmixtura”, dice Ciller en una conversación con Acción contra el Hambre.

Luzmixtura es un estudio de iluminación integral para viviendas y negocios, dónde diseñan y producen de lámparas artesanales contemporáneas. “La esencia de la vida es la luz. Esta energía rige todo el ciclo vital de las personas y una buena iluminación hace que mejore su vida”, explica. Su proyección a futuro es crecer y convertir el ahora pequeño estudio-taller en un espacio amplio dónde producir las lámparas con su propia plantilla de artesanas.

Al llegar de Madrid, participó en el programa de emprendimiento juvenil Generación IN y consiguió ganar el concurso nacional Emprende Innova Comparte en el pasado mes de junio. “Creo que desde que vi por primera vez el catálogo de IKEA, pensé que podía dedicarme a diseñar objetos”. Luego se mezcló el amor por el oficio de su madre, la cerámica, con sus estudios de arquitecta e iluminación: “se unieron varios factores para desarrollar Luzmixtura. Por un lado, el volver a mis orígenes y, por otro, el aplicar lo aprendido en mi etapa académica”.

Este negocio abre sus puertas ya al público en este septiembre para iniciar la campaña de Navidad y con el estudio plantea promocionar iluminación para los jardines: “es una buena oportunidad, en estos tiempos, optimizar el jardín y disfrutar de una buena luz”. Aunque Lucía sabe que la mayoría de los clientes que compren sus lámparas procederán del extranjero: “En España no se vende igual el trabajo del diseñador, arquitecto, artesano… Se ha perdido el valor de muchas profesiones”.

Un camino con luz

La llegada del coronavirus paralizó Luzmixtura pero estos meses de confinamiento le han servido para afianzar su proyecto y crear comunidad con otras personas emprendedoras. “Es fundamental rodearte de gente que se encuentra en tu misma situación. Al final, necesitas conocer a personas que sienten esa incertidumbre, miedo, ansiedad… Tenemos que uniros para estar protegidos”, señala Ciller.

Esta arquitecta tiene claro que no habría sido posible su idea sin las técnicas del programa de emprendimiento: Silvia Jimenez y Santi Ros. “Son dos técnicas profesionales que siempre llevan una sonrisa en la cara. Los adoro. Me han apoyado incondicionalmente en mi idea, me han ayudado a nivel técnico, como, por ejemplo, a desarrollar el plan financiero, y me han enseñado también a nivel humano. Me inspiran a esforzarme más en ser amable con las personas que me rodean".

Lucía cierra la entrevista hablando de la canción de Pau Donés y de las mujeres artesanas que le están acompañando en este viaje. “Busco mucha inspiración en gente que admiro, escucho podcasts de diseño y sigo a Sabine Marcelus y Olafur Eliasson. Y cuando me da el bajón, pienso que ellos empezaron por algún lado y que, si no lo intento, nunca sabré si podré llegar”.

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