A sus 30 años, María Rodríguez, lleva tiempo sin ninguna estabilidad laboral. Estudió Trabajo Social y enlazó diferentes empleos hasta quedar en paro hace tres años. Ya había estado desempleada en periodos más breves antes así que al perder su último empleo, que había durado seis meses, se dijo: “Otra vez no. No puedo más. Yo no pido un trabajo de por vida, pero sí una mínima estabilidad”.
Es entonces cuando entró como participante en Vives Emplea Sevilla Norte. Ya había pasado previamente por un programa público de empleo, pero no había encontrado la ayuda que necesitaba. “Yo ya no veía otra forma de hacer mi curriculum ni sabía cómo buscar trabajo de otra manera”, explica.
En Vives Emplea ha aprendido a enfocar la búsqueda de empleo de una manera completamente diferente y ha contactado con gente nueva, abriendo su círculo de contactos. Se mantiene activa y trabaja para su propia asociación sin ánimo de lucro en la que fomentan la educación en valores a través de la capoeira en personas de entre cinco y 50 años.
