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Transferencias monetarias para los afectados por el tifón Haiyan

Tras el tifón Haiyan en Filipinas, beneficiarios de los proyectos de saneamiento

 

“La oportuna intervención de Acción contra el Hambre nos ayudó a mí y a mi comunidad a reconstruir nuestras vidas pese a la dura experiencia por la que habíamos pasado”

Hace dos años, el tifón Haiyan dejó 15 millones de personas afectadas. Durante los tres primeros meses tras el desastre, parte de los proyectos de Acción contra el Hambre en Filipinas se enfocaron a la ayuda alimentaria y las transferencias monetarias para los afectados. Gracias a esta subvención, miles de familias pudieron reconstruir sus medios de vida. Cyrinne Anota, Rosalie Linay y Marilou Olino nos cuentan su experiencia.

Tras la identificación de los grupos de población más vulnerables –mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, niños con desnutrición aguda, personas discapacitadas, o ancianos- 10.000 personas fueron seleccionadas para recibir una transferencia monetaria no condicionada. Esta subvención se complementó con formaciones en salud y nutrición, protección infantil, higiene y saneamiento y ahorro económico.

Cyrinne Anota y su marido Romeo recuerdan su extensa plantación familiar de coco, su principal fuente de ingresos para criar a sus cinco hijos. Antes de que el tifón golpeara y destruyera su ciudad en Burauen, Leyte, la pareja dependía de lo que ellos llamaban el “Árbol de la vida”, el palmeral donde Romeo solía trepar para recolectar el líquido de los frutos que luego procesaría para convertirlo en vino. Romeo ganaba lo imprescindible para alimentar a su familia, pero su fuente de ingresos quedó arruinada al paso del tifón. Gracias a la subvención de Acción contra el Hambre, Cyrinne pudo invertir parte del dinero y hoy ha podido sacar adelante un pequeño negocio.“Ahorré algo de dinero para comprar materiales y lechones que vendimos pasados unos meses y eso nos permitió poner una pequeña tienda. Ahora ya puedo dormir tranquila sabiendo que no me tengo que preocupar por subsistir”, Cyrinne Anota, receptora de las transferencias monetarias.

Rosalie Linay, su marido Raúl y su hijo de un año vivían cerca del río, así que cuando Haiyan tocó tierra, trayendo consigo fuertes inundaciones, esta familia perdió su casa. Sus vidas ya eran difíciles antes. Estos dos jóvenes de veinte años subsistían con el salario de panadero de Raúl, que apenas le daba para alimentar a su familia, a pesar de invertir 14 horas diarias en su trabajo. Haiyan no hizo más que empeorar su situación. Raúl perdió su trabajo y tuvieron que acudir a sus familiares en búsqueda de ayuda.

Esta joven familia fue una de las seleccionadas por Acción contra el Hambre como beneficiarios del programa de transferencias monetarias no condicionadas. Rosalie recibió subvenciones durante seis meses y tuvo la oportunidad de asistir las formaciones de capacitación en materias de salud y nutrición, agua, saneamiento e higiene y  microfinanciación y ahorro.

Mientras tanto, Marilou Olino perdió a su marido unos días antes del tifón a causa de una enfermedad coronaria. Estando todavía en duelo, esta madre de 3 niños tuvo que hacer frente entonces a otro reto: el tifón Haiyan, que devastó su aldea en Santa Elena, Tacloban City y con ello su principal fuente de ingresos, una parcela de tierra con berenjenas, pimientos y judías verdes.

“La oportuna intervención de Acción contra el Hambre nos ayudó a mí y a mi comunidad a reconstruir nuestras vidas pese a la dura experiencia por la que habíamos pasado”. Gracias a las transferencias monetarias no condicionadas Marilou pudo continuar enviando a sus hijos al colegio y darle a su familia los cuidados esenciales, pagar sus facturas cada mes e incluso consiguió ahorrar algo para financiar un negocio de préstamos a pequeña escala.

“Las historias de Cyrenne, Rosalie y Marilou, que se negaron a rendirse al desánimo después de que el supertifón arruinara todo lo que tenían, ilustra el sentido de esperanza y fe en los momentos difíciles”, Javad Amoozegar, director País de Acción contra el Hambre en Filipinas. 

 

Para más información acerca de la situación de la población filipina tras el tifón Haiyan: 

Dos años después, Filipinas es más resiliente ante los desastres

Dos años de Haiyan, camino de la recuperación: Los proyectos de Acción contra el Hambre tras el tifón Haiyan (PDF)

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