¿En qué países hay más explotación infantil?
La explotación infantil es una de las mayores lacras sociales y humanitarias del mundo y se define como todos aquellos tipos de trabajo que privan a los niños de tener una infancia normal, que roban su potencial y su dignidad. Además, todas estas tareas tienen consecuencias perjudiciales en su desarrollo físico y psicológico.
Debemos tener claro que la explotación infantil no está presente en aquellos trabajos que no atentan a su salud e integridad, además de no interferir en su desarrollo personal ni escolarización. Es decir, aquellas obligaciones que hacen después de la escuela, ayudar en el negocio familiar o un empleo durante las vacaciones para ganar dinero extra no es explotación infantil.
De hecho, es todo lo contrario. Este tipo de trabajo puede ser una gran oportunidad para niños y adolescentes de ganar experiencia, de aprender nuevas habilidades y destrezas. También para prepararse para su edad adulta y que tengan un trabajo con mayores responsabilidades.
Explotación infantil en el mundo
La explotación infantil es perjudicial para el bienestar de los niños, afecta su desarrollo físico y mental. Las estimaciones mundiales para el año 2020 sobre el trabajo infantil, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), señalan que más de 150 millones de niños se encuentran en situación de trabajo infantil en el mundo, 63 millones de niñas y 97 millones de niños.
Estas cifras implican que 1 de cada 10 niños en todo el planeta está en situación de explotación infantil. Y casi la mitad de ellos desempeña trabajos peligrosos que ponen en riesgo directo su salud, desarrollo moral y seguridad. La región del planeta con más explotación infantil es África Subsahariana con 86,6 millones de niños. En concreto, afecta al 24% de los niños y niñas de entre 5 y 17 años.
Tipos de explotación infantil
La explotación infantil es un tipo de esclavitud contemporánea. Millones de niños son obligados a trabajar desde muy pequeños, un drama que no solo les avoca a trabajar, además influye muy negativamente a su futuro. Son menores que no tienen acceso a una buena alimentación, a la salud, a la educación, a las necesidades básicas para tener una vida digna, lo que aumenta dramáticamente la tasa de mortalidad infantil en el mundo.
Entre los diferentes tipos de explotación infantil, encontramos:
- La trata infantil
La trata infantil es un negocio que moviliza mucho dinero anualmente. Se debe a la globalización, pobreza y la demanda de mano de obra barata.
- La explotación sexual
Casi 2 millones de niños son obligados a ejercer la prostitución, utilizados en industria de la pornografía infantil o en el turismo sexual.
- Niños soldados
Muchos países vulnerables y con conflictos armados fuertes, utilizan a los niños como soldados, y los envían para la primera línea de batalla.
- Matrimonio infantil
Millones de niñas son obligadas a casarse antes de cumplir los 18 años de edad.
- Trabajo infantil forzoso por endeudamiento
Los niños son forzados a trabajar para una persona debido a que tienen una deuda con ella.
- Trabajo forzoso en la mina y en la agricultura
Millones de niños trabajan en lugares peligrosos como las minas o como esclavos en la agricultura. A pesar de ser trabajos que los privan de su desarrollo, dignidad y servicios básicos, son las áreas donde se encuentran más menores explotados.
- Esclavitud doméstica
Más de 40 millones de niños trabajan como empleados domésticos; son menores que sufren también de maltratos físicos y psicológicos.
Explotación infantil en la actualidad
La explotación infantil en la actualidad ha aumentado respecto a años anteriores y se estima un mayor aumento a finales del año 2022 a consecuencia del Covid-19.
Las regiones del planeta con mayor tasa de explotación infantil son África y Asia y el Pacífico las que tienen más niños en situación de trabajo infantil y trabajo peligroso. Por su parte, las zonas del mundo que más están avanzando en regular con normas internacionales para luchar contra esta lacra son América Latina y África.
Explotación infantil causas y consecuencias
Las causas y las consecuencias de la explotación infantil revelan la grave situación que viven millones de niños alrededor del mundo.
Causas de la explotación infantil
Una de las principales causas de la explotación infantil es la situación de pobreza que viven millones de niños. Se encuentran en el umbral de pobreza que les impide tener los recursos necesarios para comprar alimentos, tener una vivienda, contar con una educación o recibir asistencia médica, entre otras privaciones. Por lo que se ven obligados a contribuir con la economía familiar.
Otra de las causas de la explotación infantil es cuando los niños son huérfanos y están solos, no tienen ningún familiar que los cuide.
La falta de acceso a la educación es otra de las causas, ya que los menores son más proclives a convertirse en víctimas de trabajo infantil, si no asisten a clases para tener otras oportunidades en el futuro.
La necesidad de mano de obra barata en los países en vías de desarrollo, ha originado que millones de niños sean explotados en trabajos de largas jornadas a bajo precio.
Consecuencias de la explotación infantil
Las consecuencias de la explotación infantil tienen un impacto negativo en el desarrollo físico en la infancia. Pueden sufrir de enfermedades, de desnutrición, dolencias crónicas por el esfuerzo en el trabajo, quemaduras, cortes o cualquier otro accidente, puesto que por lo general no trabajan en lugares que cumplan las normas de seguridad.
También afecta su desarrollo emocional, debido a que tienen que pasar largas jornadas de trabajo en ambientes hostiles, peligrosos e incluso violentos.
¿Qué dice la ONU respecto a la explotación infantil?
Para la ONU, se considera niños trabajadores cuando son demasiado jóvenes para trabajar o participan en actividades peligrosas que pueden comprometer su desarrollo físico, mental, social o educativo.
Las regiones de África y Asia y el Pacífico juntas alcanzan la cifra de casi nueve de cada diez niños en situación de trabajo infantil en todo el mundo. La población restante se divide entre las Américas (11 millones), Europa y Asia Central (6 millones) y los Estados árabes (1 millón).
A pesar de que el porcentaje de niños en trabajo infantil es más alto en los países de bajos ingresos, su número es en realidad mayor en los países de ingresos medios: el nueve por ciento en los países de ingresos medios bajos, y el siete, en los de ingresos medios altos. Las estadísticas sobre el número absoluto en cada grupo de ingresos nacionales indican que 84 millones de niños están en situación de trabajo infantil, el 56 por ciento de los cuales vive en países de ingresos medios, y otros 2 millones viven en paises de altos ingresos.
Explotación minera infantil
Cerca de 1 millón de niños trabajan en minas y canteras de pequeñas dimensiones, según estimaciones de la OIT. Estos niños de entre 5 y 17 años se enfrentan a un trabajo duro y peligroso, y no tienen acceso a los servicios básicos, a la escolarización, a una vivienda, y mucho menos a servicios de salud.
La Ley de explotación infantil tiene el objetivo de proteger los Derechos Humanos de los niños, niñas y adolescentes de todo el mundo. Garantizar su buen desarrollo tanto físico y mental, y acabar con las redes de explotación infantil que operan en todo el mundo.
En el artículo 32 de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea dice que “Se prohíbe el trabajo infantil. La edad mínima de admisión al trabajo no podrá ser inferior a la edad en que concluye el período de escolaridad obligatoria, sin perjuicio de disposiciones más favorables para los jóvenes y salvo excepciones limitadas.
Los jóvenes admitidos a trabajar deberán disponer de condiciones de trabajo adaptadas a su edad y estar protegidos contra la explotación económica o contra cualquier trabajo que pueda ser perjudicial para su seguridad, su salud, su desarrollo físico, psíquico, moral o social, o que pueda poner en peligro su educación.”
Acciones contra la explotación infantil
La meta de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) es hacer un llamamiento a la comunidad internacional para que se adopten medidas eficaces y rápidas para eliminar el trabajo forzoso en niños. Es necesario aplicar políticas públicas para su radicalización, para conseguir que en el año 2025 se ponga fin al trabajo infantil en todas sus formas.
La ONU, en relación con la explotación infantil, promueve acciones inmediatas para acabar con la explotación infantil. Señala que es necesario motivar a las asociaciones para que colaboren en todos los niveles. El mundo pospandemia debe estar libre de trabajo infantil.
En Acción Contra el Hambre queremos, a través de nuestras acciones por todo el mundo, aportar nuestro granito de arena para eliminar la explotación infantil en el mundo, y poner fin al hambre y la desnutrición, una de sus principales causas.
Según un informe del año 2017 de Save the Children titulado Infancias Robadas 2017, en España también existe la explotación infantil. Con datos muy lejanos a los de África y Asia, España se encuentra en la posición número 14 de los países en los que el menor número de niños pierden su infancia como consecuencia de la explotación infantil. Aun así, según la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), en España hay alrededor de 20.000 menores víctimas de la explotación infantil.
Sin embargo, en la lista de países en que la infancia está menos amenazada, el país español ocupa el puesto 14, lo que significa que está en los mejores lugares para que los niños puedan crecer y desarrollarse libremente.
