Proyectos solidarios, ejemplos y cómo crear uno

Los proyectos solidarios pueden lograr un cambio en un país, región o comunidad, y tienen como objetivo principal mejorar la vida de las personas que están en circunstancias difíciles. Son programas con mejoras medibles y tangibles, que tienen bien definidas sus acciones.

Los proyectos solidarios brindan una experiencia de aprendizaje y permite a un grupo de personas ser parte de una iniciativa que genera verdaderos cambios en cualquier lugar, y en cualquier ámbito, se le puede dar un enfoque social o incluso medioambiental.

¿Qué son los proyectos solidarios?

En cuanto a la definición de los proyectos solidarios, podemos decir que son actividades sin ánimo de lucro que son creadas y desarrolladas por personas de una misma localidad, que han encontrado en dicho lugar alguna carencia o problema.

Este grupo de personas muestra su solidaridad y asume la responsabilidad y compromiso para lograr un cambio positivo en la comunidad, aporta valor añadido, y siguen las fases de planificación, preparación, ejecución de actividades y seguimiento para obtener resultados exitosos.

Objetivo de los proyectos solidarios

Los proyectos solidarios tienen como objetivo difundir la solidaridad entre las personas y generar un impacto positivo en la comunidad, y están dirigidos, en muchos casos, a las personas que están en riesgo de exclusión social.

Una persona está en situación de exclusión social cuando se le priva de los derechos fundamentales que hacen que pueda tener un desarrollo humano óptimo. Es decir, aquellos individuos que no disfrutan de una ciudadanía social plena y con condiciones de igualdad, y que no disponen de acceso a la vivienda, al agua potable, a una atención de salud adecuada, a una educación de calidad y a la cultura.

Estos programas deben llevar a cabo prácticas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente, y estar vinculados con la comunidad local.

Para participar en un proyecto solidario debes ser de un país de la Unión Europea, o a países del programa no pertenecientes a la UE como Islandia, Liechtenstein, Macedonia del Norte y Turquía. Además de otros países vecinos de la Unión Europea.

Tipos de proyectos solidarios

Existen diversos tipos de proyectos solidarios que numerosos jóvenes y emprendedores están llevando a cabo en el país y en el mundo entero:

• Proyectos educativos

Un proyecto solidario enfocado en el área educativa busca promover la solidaridad como un valor de las personas, también de dar a conocer sus actividades a la comunidad educativa. Desean generar espacios para que niños y jóvenes en edad escolar puedan tomar conciencia de los problemas sociales que existen en la localidad.

Descubre aquí nuestro uno de nuestros proyectos solidarios educativos.

• Proyectos solidarios culturales

Los proyectos solidarios culturales impulsan el desarrollo de las industrias culturales, con el objetivo de contribuir a la formación de una sociedad que visibilice la cultura como una parte importante del desarrollo humano.

Descubre aquí nuestro uno de nuestros proyectos solidarios culturales.

• Proyectos de economía social

Los proyectos de economía social son una gran oportunidad para que converjan organizaciones sociales y actividades económicas diferentes para que se genere un trabajo humano de solidaridad, surjan cooperativas, empresas autogestionadas, y un sinfín de modos alternativos de organización de economía social.

Descubre aquí nuestro uno de nuestros proyectos solidarios de economía social.

• Proyectos de empleo

Los proyectos solidarios de empleo están destinados a implementar estrategias y programas que amplíen nuevas oportunidades en el ámbito laboral, ofreciendo información valiosa del mercado laboral y nuevos trabajos.

Descubre aquí nuestro uno de nuestros proyectos solidarios de economía social.

¿Quiénes pueden poner en marcha un proyecto solidario?

Un proyecto solidario lo pueden poner en marcha jóvenes de entre 18 y 30 años, durante un período de tiempo entre dos y doce meses, y debe estar formado por, al menos, 5 personas que residan legalmente en el mismo país.

Además, y normalmente, un proyecto solidario consta típicamente de las siguientes etapas:

1. Planificación
2.  Preparación
3.  Implementación de las actividades
4. Seguimiento (incluida la evaluación de las actividades y el intercambio de resultados del proyecto)

Claves para crear un proyecto solidario

Para crear un proyecto solidario, la Unión Europea incentiva a amigos a unir fuerzas para crear un cambio positivo en la comunidad. Solo hay que inscribirse en el portal que ponen a disposición para contribuir a resolver problemas regionales, nacionales e incluso a nivel internacional.

Entre los requisitos que se deben cumplir destacamos los siguientes:

1. El proyecto solidario debe tener valor europeo. Es decir, responder a las prioridades establecidas por la Unión Europea como el cambio climático, el compromiso democrático o la igualdad de género, entre otros.
2. El proyecto solidario debe durar al menos 12 meses.
3. Para participar en un proyecto solidario debes pertenecer a los países pertenecientes a la Unión Europea, o a países del programa no pertenecientes a la UE como Islandia, Liechtenstein, Macedonia del Norte y Turquía. Además de otros países vecinos de la Unión Europea.
4. El proyecto solidario debe estar comprendido por 5 o más personas entre 18 y 30 años.

¿Y qué beneficios tiene participar en uno?

Participar en un proyecto solidario supone una gran experiencia de aprendizaje no formal. Te permite fomentar tu sentido de la iniciativa, la ciudadanía activa y el espíritu emprendedor. Te facilita vivir de primera mano lo que es iniciar un proyecto de emprendimiento social, con todo lo que ello conlleva. 

Al poner en práctica tus propias ideas, afrontar situaciones inesperadas y encontrar soluciones para ellas, aprenderás nuevas habilidades y podrás desarrollar tus capacidades, expresar tu propia creatividad y asumir la responsabilidad de tus acciones.

¿Un proyecto solidario es igual a un proyecto humanitario?

Tanto los proyectos solidarios como los proyectos humanitarios son sin fines de lucro y buscan el bienestar de las personas, especialmente en víctimas de la pobreza, de desastres naturales o de conflictos armados, entre otras carencias. Son acciones que tienen como objetivo proteger los derechos de los individuos con diferentes programas de ayuda.

Entre sus diferencias podemos decir que los proyectos humanitarios tienen un mayor alcance porque surgen como respuesta a diversos eventos de escala internacional como catástrofes naturales. Los proyectos solidarios son actividades ideadas y desarrolladas por grupos de jóvenes en su comunidad local.

¿Tienen que ver los proyectos solidarios con las famosas redes de apoyo?

Efectivamente, una red de apoyo representa un elemento muy importante de bienestar para la persona que lo necesita y genera un gran impacto en su calidad de vida. Es una estructura que brinda soporte a las personas sobre un área determinada, ya sea en salud, empleo, educación o apoyo emocional, entre otros.

La red de apoyo está conformada por un grupo de organizaciones que trabajan de forma conjunta para dar respuesta a un determinado problema a una persona o grupo de personas. Suministra, además de apoyos materiales e instrumentales, las herramientas necesarias para mejorar sus condiciones de vida y su estado emocional. Por lo tanto, sí están relacionados.

Apoyemos juntos las iniciativas que ya tenemos en marcha, creemos más proyectos solidarios

En Acción contra el Hambre queremos multiplicar el alcance de nuestros proyectos solidarios a todos los países del mundo que lo necesiten. Por ello, desarrollamos programas de emprendimiento social y redes de apoyo social con organizaciones en las zonas más vulnerables. ¡Juntos podemos crear un mundo mejor!