Kenia: respondemos a las inundaciones

Las devastadoras inundaciones causadas por las lluvias torrenciales en varias zonas de Kenia han provocado la destrucción de cultivos, sistemas de irrigación e infraestructuras sanitarias y de saneamiento, dejando a cientos de miles de personas sin hogar, con poco o ningún ingreso y una situación de seguridad alimentaria que se deteriora rápidamente.

Según informes preliminares, las lluvias han causado daños por inundaciones dejando un balance de aproximadamente 260 000 personas desplazadas y más de 150 víctimas mortales (incluidas más de 40 personas que murieron al estallar una represa en la región del Valle del Rift, en Kenia, que destruyó cientos de hogares y negocios). Es probable que las cifras aumenten a medida que las fuertes lluvias continúen hasta julio, según las predicciones meteorológicas.

Este año, el departamento de meteorología local de Nairobi describió un patrón anormal de precipitaciones, al que ha denominado como un fenómeno “mini El Niño”, que afecta a 29 países de África oriental y amenaza a una población que todavía se está recuperando de la catastrófica sequía de 2017.

“Estamos trabajando con el gobierno local para brindar servicios integrales de salud y nutrición en las áreas afectadas y estamos llevando a cabo evaluaciones nutricionales y refiriendo a los niños desnutridos a programas de tratamiento”, señala Hajir Maalim, director de Acción contra el Hambre para África Oriental.

Las regiones más afectadas actualmente son Turkana, Tana River, Garissa, Isiolo, Kisumu, Taita, Mandera, Wajir, Marsabit, West Pokot, Samburu y Narok.