Níger: la población, víctima del conflicto, atrapada en el fuego cruzado y con necesidades urgentes de protección y asistencia humanitaria

Entre los pasados 19 de mayo y 3 de junio, se produjeron dos de los mayores ataques en la historia del actual conflicto en Níger, con un número desconocido de víctimas mortales y más de 40.000 desplazados. Tres semanas más tarde, las familias siguen viviendo a la intemperie, bajo los árboles, sin un acceso adecuado a asistencia básica. Las lluvias han comenzado y los niños son particularmente vulnerables a contraer enfermedades. Save the Children estima que el 60% de los desplazados son niños. Las familias no están seguras y las que huyeron se enfrentaron a un nuevo ataque el 16 de junio. 280.000 personas viven desplazadas en Níger, sumándose a los 2,7 millones de personas desplazadas en la región Cuenca del Lago Chad.
Los compromisos adquiridos recientemente por los líderes mundiales en la Cumbre Mundial Humanitario en Estambul y en la segunda Cumbre de Seguridad Regional en Abuja para mejorar la asistencia humanitaria y la protección de los civiles neecsitan hacerse efectivos en tiempo real en Níger. Actualmente, la comunidad internacional se centra en una solución militar, mientras las necesidades humanitarias y de protección de nueve millones de personas en toda la región de la Cuenca del Lago Chad qquedan relegadas.
12 organizaciones humanitarias internacionales que trabajan en Níger hacen un llamamiento a los Estados Miembros de las Naciones Unidas que se dan cita en la reunión del Segmento de Asuntos Humanitarios ECOSOC en Nueva York esta semana, para aumentar los esfuerzos diplomáticos y la ayuda financiera para apoyar la respuesta humanitaria en Diffa, donde la situación humanitaria se está deteriorando rápidamente y la respuesta actual es insuficiente.
El Gobierno de Níger y los actores humanitarios deben recibir el apoyo necesario para mejorar la capacidad de prevenir, prepararse y responder a la creciente crisis humanitaria. Esto incluye la mejora de la coordinación, la participación comunitaria, y contar con un stock de emergencia, así como un mejor acceso a la información sobre las necesidades, le puesta en marcha de medidas específicas para niños y mujeres y una financiación de emergencia rápida. Además, las acciones que se lleven a cabo para salvaguardar a la población deben incluir medidas por parte del Gobierno de Níger para construir la confianza de la población local. Si bien la crisis no hace sino ir en aumento, los fondos son más escasos.
"No son las armas las que provocan la mayor mortalidad durante la guerra; son los impactos secundarios de conflicto los que resultan más devastadores para la población. Enfermedades, hambre y el agotamiento de los mecanismos de adaptación pueden causar hasta un 90 por ciento de la mortalidad relacionada con el conflicto. Diffa ya era propensa a la inseguridad alimentaria, la desnutrición y a riesgos para la salud materno-infantil. Es crucial que la respuesta humanitaria sea rápida para reducir el número de víctimas", señala Mohammed Chikhaoui, director de Oxfam en Níger.
Las orhanizaciones humanitarias internacionales que suscriben este llamado urgente a los donantes internacionales para movilizar rápidamente los fondos disponibles, y dar respuesta a las necesidades inmediatas de cientos de miles de personas atrapadas en el conflicto en la región de Diffa de Níger, así como en Chad, Camerún y Nigeria. Antes de esta nueva emergencia, las necesidades humanitarias en Diffa tan sólo fueron financiados en un 28%. Ahora las necesidades son aún mayores y tan solo se cuenta con el 16% de los fondos necesarios para la respuesta global a la crisis que se vive en la cuenca del lago Chad.
"El apoyo humanitario en Diffa es crucial. No sólo para salvar vidas, sino también porque va a ayudar a mantener alejados a aquellas personas en una situación desesperada, especialmente los jóvenes, de los grupos insurgentes,  a menudo vistos como la única opción, donde apenas se cuenta con escuelas, alimentos o trabajo", afirma Matías Meier, director de ICR en Níger. Abordar las causas y consecuencias de este conflicto requiere acciones conjuntas innovadoras en colaboración con los gobiernos afectados y la sociedad civil local para hacer frente a la desigualdad, a la marginación social y política y a la pobreza.