Nuestros equipos responden a la crisis de las inundaciones de Mindanao

Mientras Mindanao, la segunda isla más grande del archipiélago filipino, lidia con las secuelas de devastadoras inundaciones y deslizamientos de tierra, Acción contra el Hambre se moviliza para responder a las necesidades urgentes de las comunidades afectadas. La reciente avalancha de lluvias torrenciales, advertida por la Administración de Servicios Atmosféricos, Geofísicos y Astronómicos de Filipinas (PAGASA) el 18 de enero de 2024, ha dejado un rastro de destrucción a su paso, especialmente en Agusan del Sur, Davao de Oro, Davao Del Norte y Davao Oriental, afectando a casi 1,1 millones de personas y desplazando a 354.000 individuos.
En Davao de Oro, un trágico corrimiento de tierras sepultó vehículos y causó heridos, agravando los problemas de una población ya vulnerable. Las viviendas, la agricultura y las infraestructuras sufrieron graves daños en toda la región. A pesar de los esfuerzos del gobierno nacional y de las organizaciones humanitarias, incluido el Departamento de Bienestar Social y Desarrollo (DSWD), que proporciona ayuda esencial, la magnitud del desastre requiere recursos y apoyo adicionales, y algunas provincias han expresado la necesidad de ayuda para complementar sus esfuerzos de respuesta.

Acción contra el Hambre está sobre el terreno desde el 8 de febrero para identificar las necesidades humanitarias inmediatas de los afectados. Nuestro equipo de Respuesta de Emergencia en Filipinas se ha coordinado con las autoridades locales y las organizaciones asociadas para atender las necesidades inmediatas de las comunidades en apuros. Hemos establecido contactos y alianzas en las provincias afectadas, lo que nos permite responder con eficacia y eficiencia. A medida que continúan las evaluaciones y aumenta la necesidad de ayuda, Acción contra el Hambre se prepara para proporcionar un apoyo vital a los afectados. 
Las necesidades identificadas incluyen asistencia alimentaria, agua, saneamiento, refugio, atención sanitaria, apoyo agrícola y combustible para cocinar. Acción contra el Hambre se compromete a abordar estas necesidades de forma integral, centrándose en las poblaciones más vulnerables de los centros de evacuación y las comunidades de acogida. Nuestra respuesta abarcará una serie de intervenciones, como la distribución de alimentos y las iniciativas de agua, saneamiento e higiene (WASH).

Una de las mujeres desplazadas, Donabelle, compartió su desgarradora experiencia de la catástrofe. Embarazada y con su marido incapacitado para trabajar como carpintero debido al desplazamiento, se enfrenta a un futuro incierto en el centro de evacuación. El miedo y la incertidumbre que envuelven su situación son palpables, lo que subraya la urgente necesidad de apoyo y asistencia.

Los próximos pasos de Acción contra el Hambre implican una respuesta específica y coordinada, dando prioridad a las necesidades más acuciantes de las comunidades afectadas. Con nuestros equipos movilizados y los recursos listos, estamos preparados para marcar una diferencia significativa en las vidas de los afectados por esta tragedia.