Historias
Eman - Diez lecturas de una década de bloqueo

#OpenGaza
Salí del coche en una ruidosa calle de Rafah mientras una chica sonriente me hizo señas para entrar. Las ventanas rotas, ahora cubiertas con sábanas de plástico, me recuerdan incluso que esa supuesta área segura ha sido afectada por la guerra. ‘Actualmente no podemos permitirnos reparar la casa’, dice Eman al notar que observo el edificio.
Eman es madre de dos hijos y su pasión es la fotografía y el audiovisual. ‘Tenemos un estudio de fotografía en la familia. Recibí mi primer encargo cuando tenía 14 años. Me encargaron tomar fotos en la fiesta de una boda’. Eman explica cómo solía controlar sus ganancias antes de tener su propia cámara. ‘Solía pagar el 80% de mis beneficios como tarifa de ahorro, guardando para mí alrededor de 50 NIS (12€) por encargo’. A través de la ayuda de Acción contra el Hambre, Eman compró su propia cámara y ahora gana 5 o 6 veces más que antes.
El marido de Eman, incapaz de trabajar por razones médicas, está muy orgulloso de ella. Esto, sin embargo, sigue desafiando a Eman al ser el pie sustentador de la familia. ‘Mi hija mayor ha sufrido de problemas auditivos crónicos desde que nació y mi marido también necesitó cuidados médicos continuos. Yo gasté el dinero en el Ministerio de Asuntos Sociales, 252 NIS (60€) al mes, íntegramente en medicación’.
Hablando con Eman, es evidente que está preocupada por el dinero. Los recuerdos de la última guerra aún persisten. ‘Nosotros podemos escasamente pagar nuestras facturas. No podemos permitirnos cocinar con gas y yo estaba usando pedazos de ropa como pañales. Reduje mis comidas para mantener a mis hijas y marido bien alimentados’.
Es bastante inusual ser una mujer fotógrafa en Gaza, es por lo que Eman despierta el interés de muchas otras mujeres en su zona. ‘En el estudio de la familia, solemos tener visitas de mujeres que me han visto haciendo fotos en bodas y les gustaría aprender. Actualmente estoy enseñando a algunas de ellas gratis’. Pregunto a Eman por qué no incluye en su negocio tarjetas y le aconsejo preparar un álbum de fotos con ejemplos de su trabajo. ‘Eso es exactamente lo que haré, porque voy a comprar un ordenador pronto’. Eman sonríe.
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